Vamos a resucitar

 Nosotros, los cristianos católicos, en nuestra profesión de fe, creemos firmemente como verdadero que al final de los tiempos todos hemos de resucitar. Lo recitamos en el credo cuando decimos: "creo en la resurrección de los muertos".

Prácticamente, en la totalidad de las religiones existe la convicción de que hay una vida después de esta vida. Ahora, nos diferenciamos de esas religiones porque creemos, además, en el juicio final y en la resurrección para la vida futura. Básicamente, seremos quienes somos ahora, pero sin las limitaciones propias de lo material: no nos vamos a enfermar, ni tendremos hambre ni sed; tampoco nos vamos a cansar y tendremos el mayor motivo para estar felices que no es otra cosa que estar con Cristo Jesús.

Ahora bien, nuestro Señor Jesucristo nos ha enseñado también que este mundo, tal cual lo conocemos, va a tener un fin. Y el final de este mundo va a coincidir con su segunda venida.

El Señor se sirve del modo de hablar de su época para hacernos entender que el fin del mundo será evidente para todos. Cuando el Señor se refiere a los eventos cósmicos no quiere decir que literalmente vaya a ocurrir. Algunos se quedan en la sola literalidad de la Palabra de Dios olvidándose de lo esencial del mensaje: este mundo es pasajero y lo importante es la vida eterna.

El mensaje de Cristo tiene como fin regalarnos la paz. Nuestra alma, si tiene la fe puesta en el Señor, no pierde la paz ante los eventos difíciles, adversos y hasta perniciosos, porque nuestra confianza y la razón de la felicidad no la ponemos en un estado de bienestar material. Nuestra fe y nuestra felicidad están puesta en Cristo Jesús.

También Cristo Jesús nos enseña que no faltarán momentos de dificultad a lo largo de nuestra vida. Y que hemos de asumirlos con fortaleza y con la confianza puesta en Él.

Ten presente esto siempre: tendremos momentos difíciles que podremos superar con la fe y la confianza en Cristo Jesús. Nuestro Señor nos ha enseñado y así lo creemos que este mundo tendrá un final que coincidirá con su segunda venida y que al final vamos a resucitar todos.

A Cristo Jesús, el Señor, la gloria, el honor y el poder, por los siglos de los siglos.