Domingo de la Santísima Trinidad - Ciclo B
El libro del Deuteronomio es como el primer catecismo de Israel. Se resume en tres largos discursos de Moisés toda la enseñanza de Moisés. En el primer discurso, Moisés recuerda al pueblo las maravillas que hizo Yahweh en medio de ellos. Les invita a rechazar y alejarse se cualquier cosa que pueda poner en peligro la fe en Dios: idolatría, superstición. Al final del discurso, que escuchamos en la primera lectura de hoy, Moisés invita a todo el pueblo —nosotros incluidos— que haga el obsequio generoso de la inteligencia y la voluntad a Dios Todopoderoso. Eso es lo que se llama fe: “ Reconoce, pues, hoy y medita en tu corazón, que el Señor es el único Dios, allá arriba en el cielo, y aquí abajo en la tierra; no hay otro. Guarda los preceptos y mandamientos que yo te prescribo hoy, para que seas feliz, tú y tus hijos después de ti, y prolongues tus días en el suelo que el Señor, tu Dios, te da para siempre ” Hoy que celebramos el Domingo de la Santísima Trinidad es una o