Los valores de la familia edifican la sociedad

 Este domingo, el primero después de Navidad, la Iglesia celebra la Fiesta de la Sagrada Familia de Nazaret. No es difícil suponer la razón: nacido el Niño Jesús, la familia crece. Ahora es José, María y Jesús.

En las lecturas de la Santa Misa de hoy, escuchamos algunos consejos de la Sagrada Escritura no solo para la crianza de los hijos, sino para fortalecer los vínculos naturales de la familia. El amor, reconocimiento y respeto de los esposos (Col 3,12-21), el respeto religioso de los hijos a los mayores: padres y abuelos (Ecl 3,2-6.12-14), y la atención y educación de los padres hacia los hijos (Lc 2,41-52).

En la Sagrada Familia encontramos un ejemplo de como ponerlo en práctica, que como podemos ver en el Evangelio, no está exento de errores. La razón es muy sencilla: la realidad es muy rica y variada y es imposible prever todas las situaciones. En la práctica, siempre habrá errores, que pueden enmendarse con las herramientas mas sencilla: diálogo, perdón, corrección.

Una cosa que ha quedado evidente es que los errores que puedan cometerse en la educación de los hijos repercutirán en la vida de la sociedad. Si no se educan a los hijos en los valores sólidos de la fe cristiana, inevitablemente eso tendrá un reflejo en la dinámica de la sociedad.

Si se crían hijos irresponsables, con solo interés en los bienes materiales, que se centre en el egoísmo, ya sabemos como serán los futuros ciudadanos de esa sociedad. Y, evidentemente, ocasionará un daño muy difícil de reparar.

El mundo ha encontrado una serie de “armas” para blindarse contra la destrucción de los valores morales y cristianos. Antes canciones, publicidad y otras formas de comunicación que son abiertamente inmorales, los actores del “mundo” descargan la responsabilidad de la “educación de los hijos” en la familia y los padres, pero al mismo tiempo les privan de las herramientas para poder elegir los medios más oportunos para hacerlo. Hoy, los padres no pueden reclamar la inmoralidad de una publicidad o canción porque eso va en contra de la libertad de expresión, no pueden elegir un centro educativo cristiano, porque algunos actores no consideran que eso sea educación. Y así…

Estos tiempos son duros para las familias y su misión educadora. Pidamos luces al Espíritu Santo para conocer las mejores acciones y la fortaleza necesaria para ponerlas en práctica. 

Que la Sagrada Familia interceda ante Dios Padre por todas las familias, por nuestras familias.